Un simple Juego

-No solemos ver personas como ustedes, señorita - Una voz profundo y varonil proveniente de un cercano asiento a la mesa de billar donde la señorita de larga cabellera jugaba. Era Black Cat cual vestía su habitual ropaje negro y su larga gabardina, muy adecuado para este tipo de lugares. En sus manos reposaba una botella de no más de un litro de leche, claro, ya habiendo menos. Train sonrió y espero respuesta.

-A lo mismo que usted, señorita – Bebió por completo su leche de un solo trago para seguidamente levantarse y dirigirse a la chica con suma despreocupación y aires de humildad; Black Cat tomo un taco - ¿Puedo jugar? – Pregunto mientras su mirada gatuna observaba a la chica y medio sonriente esperaba respuesta.

-Perfecto - El acomodo la bola blanca, tomo la posición para así golpear esta; Black Cat apunto y espero – A ver que sale – Dijo entre murmullos mientras golpeo la bola blanca para comenzar el juego. La bola golpeo la punta del triangulo y partió. Las bolas quedaron dispersas a lo largo de la mesa, pero ninguna en condiciones de poder meter a alguna a la buchaca

-Mmm nada mal solo que… - Se acomodo para poder golpear la bola azul con el numero dos; Black Cat espero mientras calculaba y apuntaba… Golpeo. La bola golpeo a la numero siete para así de nueva cuenta alejar cualquier bola de la buchaca; Black Cat sonrió y exclamo – Tu turno – Comento para así pedir una segunda botella de leche

-Interesante – Black Cat se confió al ver esta vez la bola verde con el numero seis estar a punto de entrar a la buchaca. El chico vago varios segundos por la mesa para encontrar un buen ángulo, lo encontró y adopto la posición – Esta es mía – Golpeo la bola seis verde levemente para que seguidamente esta entrara a la buchaca de manera limpia. Después del tiro. A Train le fue entregada su botella de leche.